Instaurar un gobierno mundial requiere cambiar las bases de la sociedad: familia, valores y nación. Ante tal escenario la ruina de España forma parte de la devastación de Europa y resto del mundo haciéndolo más manejable.

Hacía un Nuevo Orden Mundial

En España los políticos parecen abducidos por las ideas globalistas de élites corporativas, que como ya se viene señalado pretede instaurar un nuevo orden mundial, basado en el férreo control y servidumbre del ser humano. Para debilitar hasta destuir el actual  se mantienen políticas (economía, cambio climático antropológico, educación, sanidad, inmigración, etc.) y se apoyan o toleran movimientos ideológicos (LGTB+, aborto, eutanasia, patriarcado, feminismo, ideología de género, etc.) que a todas luces debilitan cultura, valores, familia y naciones.

En los años 90 con caida de la URSS el poder globalista aceleró su plan de control total, el cual ha venido progresando desde principios del siglo XX, los obstáculos que apareciín eran destruídos gracias a su poder (contando con el sometido occidente). Pero en el siglo XXI  se han topado con un gran obstáculo: Rusia (a partir del 2000), China (a partir del 2012) y resto de países emergentes y en desarrollo que se están uniendo, que defienden un mundo multipolar, basado en la soberanía de las naciones y en el respeto mutuo, frente al mundo unipolar, nihilista y basado en reglas variables e impuestas.

El globalismo y España 

Las acciones debilitadoras han estado detrás de la mayoría de conflictos españoles. En el siglo XIX significados españoles traicionaron a la Corona y llevaron a cabo golpes de estado (trienio liberal), guerras civiles o propiciaron la separación del continente americano favoreciendo intereses externos. Tampoco hay que descartar que en la década de 1930 las mismas ideas estuvieran detrás de enfrentamientos sociales, golpes de estado, separatismos, destrucción y caos, con la intención instaurar un régimen comunista satélite de Moscú y extenderlo por Europa y resto del mundo. El régimen franquista frenó los planes para España pero en los años 70 volvieron a resurgir nuevos movimientos (separatismos, terrorismo, atentados, ataques de falsa bandera, implantación de ideologías, crisis económicas, deuda pública, etc.). Finalmente en el siglo XXI seguimos inmersos en occidente y obedeciendo al globalismo. 

Situación actual en España

Evolución de la deuda pública

La deuda ya impagable es un elemento coercitivo. En 2020 la deuda de España era de 1.200.000 millones €, más los intereses anuales de 32.000 millones € (9,3% del total de gasto público); cada español debía 25.000 € y pagaba del orden de 700 € al año por intereses de la deuda; en Europa solo nos superaba Bélgica, Portugal, Italia y Grecia. Dichas cifras ya se dispararon un 19% en 2021 con una deuda que alcanzó 1.427.763 millones €.

Se depende de las inyecciones de liquidez del BCE (dependiente del Banco de Pagos Internacional), del FMI, de los grandes fondos de inversión controlados por la élite financista (Black Rock, Vanguard, etc.) y de la banca privada. Es decir una refinanciación condicionada a todos estos acreedores.

La situación es preocupante, mientras que gobierno e instituciones se ven sometidos a los acreedores (poder financiero), la población parece adormecida. En este escenario cabe esperar:

  • Deterioro de valores, cultura y señas de identidad (familia y nación).
  • División de la sociedad con ideologías políticas, de género, multiculturalismo, LGTB+, cambio climático, separatismos, etc.
  • Manipulación ideológica informativa y educativa acompañada de normativas de memoria histórica y recortes en la libertad de expresión.
  • Aumento del gasto público y subida de impuestos que debilitará la clase media igualando por debajo (futuro salario vital).
  • La inversión huirá y la pobreza se irá extendiendo.
  • Destrucción del poco tejido industrial que queda.
  • Inmigración descontrolada para debilitar la sociedad.
  • El miedo y temor inoculado con la pandemia ha debilitado la sociedad y la economía.
  • El conflicto de Ucrania ha venido a dañar a Europa y España.
  • Se provocará tal caos que la gente aceptará cualquier oferta de solución (sumisión).
Actitud a mantener

Siempre se puede hacer algo. Como compartir información para ayudar a que otras personas tomen conciencia de la situación, la mayoría se conforma con lo que ofrecen los medios oficialistas. Están surgiendo naciones y alianzas que preconizan un mundo multipolar, basado en el respeto al otro, frente al unilateralismo occidental basado en una autoridad global. 

El analista Juan Antonio Aguilar sugiere situarse al margen de recetas ideológicas centrándose en metodología.

  • Identificación del enemigo, saber quién tengo enfrente. Es la base de la política (Carl Schmitt) y más cuando ese adversario intenta aplastar derechos y reprimir pensamiento, opinión y expresión.
  • Conocer cuáles son sus métodos y herramientas. Es necesario para poder oponerse a la formulación totalitaria liberal globalista. Hay que saber cómo actúa y que métodos y herramientas utiliza.
  • Analizar cómo alimenta la maquinaria con la que consigue el control y dominio. Aquí hay que hacer especial mención al “miedo”, como combustible de la ideología dominante.
Conclusión

Asistimos a un choque titánico a nivel geopolítico de los países entre globalistas y soberanistas, aquellos que buscan una estructura socio-económica más comunitaria, con valores y cultura comunitaria, y sobre todo soberana para poder decidir sobre su propio destino.

Al final del proceso histórico en que estamos viviendo o vence el globalismo e impone un totalitarismo transhumanista a nivel planetario o vencen los soberanistas en un nuevo orden multipolar que respete las identidades, las culturas y las civilizaciones.

No es una cuestión de ideología, sino de contradicción antagónica. Cada uno de estos dos bandos tiene su izquierda y su derecha, su modo de representación, sus formas democráticas.

Esta es la esencia del momento histórico presente, la libertad y la soberanía quedan del lado nuestro, el globalismo nos lleva dominando desde hace mucho tiempo, pero de forma evidente desde que colapsó el bloque de la Unión Soviética, su contrincante geopolítico.

Referencias

Una muestra de puntos vista para someter a prueba el pensamiento propio:

No hay comentarios

Nota: El contenido de esta web son experiencias y opiniones personales, si el lector actúa conforme a ello lo hace bajo su libre decisión y responsabilidad.